El mundo de los videojuegos se ha visto envuelto en una nueva polémica que enfrenta a dos gigantes de la industria con un desarrollador independiente. Nintendo y The Pokémon Company han decidido tomar medidas legales contra Pocket Pair, el estudio detrás de Palworld, un popular juego de supervivencia que ha llamado la atención por sus similitudes con la franquicia Pokémon.
Palworld logró rápidamente un gran éxito tras su lanzamiento, destacando por su jugabilidad en un mundo abierto y la posibilidad de capturar criaturas llamadas "Pals".
Sin embargo, lo que más ha generado controversia es el notable parecido de estos seres con los icónicos Pokémon, además de que el juego ha sido apodado por muchos como el "Pokémon con armas", por su inusual combinación de combate armado y captura de criaturas.
Desde el inicio, los fans y la industria especulaban que la similitud de Palworld con Pokémon podría llevar a una demanda, pero hasta hace poco, no se había confirmado. Sin embargo, el 18 de septiembre se hizo oficial: Nintendo y The Pokémon Company han presentado una demanda formal contra Pocket Pair. En ella, solicitan una orden judicial para detener la infracción de derechos de propiedad intelectual y exigen una compensación económica por los daños causados.
En el comunicado emitido por Nintendo, la compañía reafirma su postura de proteger rigurosamente sus marcas y propiedades. "Nintendo seguirá tomando las medidas necesarias contra cualquier infracción de sus derechos de propiedad intelectual, incluida la propia marca Nintendo, para proteger las propiedades que ha trabajado arduamente en construir durante tantos años", mencionaron.
Anteriormente Nintendo ya había señalado que estaban investigando el caso y que tomarían las acciones pertinentes si lo consideraban necesario.
Ahora, parece que ese momento ha llegado, lo que podría marcar un antes y un después en el destino de Palworld.
La demanda entre Nintendo, The Pokémon Company y Pocket Pair promete ser un caso que atraerá la atención de la industria, ya que se trata de una clara confrontación entre la creatividad de los desarrolladores independientes y los derechos de propiedad intelectual de las grandes empresas.
Este es un conflicto que sin duda podría tener un impacto en el futuro de ambos juegos y en la forma en que los desarrolladores diseñan títulos que puedan inspirarse en franquicias icónicas.